Cómo hacer un cabecero de cama

Si tienes en casa un tablón de madera al que no le encuentras ninguna utilidad, una de las utilidades que puedes darle es haciendo un cabecero para la cama.
Hacía tiempo que rondaba por mi casa una mesa escritorio rota que no tenía ninguna utilidad, amontonada en la terraza, así que un día se me ocurrió que con el tablón superior de la mesa podría hacer un cabecero para mi cama. Compré goma espuma con la misma medida que el tablón y de un grosor de unos 5 cm, aunque con 3 cm de grosor también hubiese quedado bien. Para comprar la goma espuma busqué por Internet una tienda especializada, aunque también hay páginas web que se puede comprar online y te lo envían a casa, todo es cuestión de buscar y comparar precios, la goma espuma no suele ser muy cara. En una mercería compre unos botones grandes y tela de skay, que como todos sabemos es una tela de material plástico que imita el cuero y se usa principalmente para tapizar. Como otra alternativa también puedes comprar telas de tapicero con estampados, dependiendo de la decoración de tu habitación y del resultado final que quieras conseguir. Yo en mi caso opté por tela skay imitación cuero rojo.

Tablón, goma espuma, botones y muestra de la tela skay roja.

A parte de estos materiales, las herramientas que se necesitan son:

- Pistola de grapas de tapicero.
- Grabas rectangulares (no las arqueadas).
- Tornillos para madera y arandelas anchas. Tantos tornillos y arandelas como botones vayas a utilizar.
- Pegamento de secado rápido (tipo Super Glue).

Conseguir una pistola de grapas de tapicero no resulta algo muy difícil y generalmente no suelen ser muy caras. En cualquier supermercado las puedes encontrar en la sección de bricolaje. Normalmente al comprar la pistola, ésta viene acompañada de las grapas, pero si no es así y tenéis que comprarlas por separado, tened en cuenta que hay distintos tipos de grapas y de distinto tamaño, hay que comprar las grapas del mismo número que utiliza la grapadora.

Como he dicho antes, utilizaremos tantos tornillos como botones vayamos a utilizar y  nos servirán como anclaje para colocar los botones. Las arandelas anchas evitará que los tornillos atraviesen la tela y la goma espuma perdiéndose en ella.

Empezamos fijando la goma espuma con pegamento en el tablón y dejaremos secar. Esto evitará que la goma espuma se mueva a la hora de grapar la tela. Colocamos la tela encima de la goma espuma y por la parte trasera del tablón la grapamos usando la grapadora de carpintero.

Forramos los botones con la tela usando el pegamento de secado rápido. Medimos y marcamos con rotulador sobre la tela dónde queremos colocar cada botón y en cada punto atornillamos, cada tornillo con la arandela, sobre la madera atravesando la tela y la goma espuma. Sobre cada tornillo pegamos los botones previamente forrados y ya tenemos listo nuestro cabecero. Sólo falta poner por la parte trasera unos soportes para poder colgarlo en la pared. 
Y así nos queda. Espero que os guste y hasta la próxima.

Desodorante natural

El desodorante natural es una alternativa muy ecológica, barata y sana, sobretodo, para aquellas personas que tienen alergia a los productos químicos nocivos que se emplean como el clorhidrato de aluminio que es el ingrediente químico más presente en los desodorantes comerciales. Es casi imposible encontrar uno que no contenga derivados del aluminio, a no ser alguna gama especial de ciertas marcas naturales que suelen salir excesivamente caras.
Hay que tener en cuenta que este ingrediente es tan nocivo que se ha asociado directamente con el cáncer de mamas, ya que el aluminio, además de ser un agente antitranspirante, que tapona los poros, es absorbido por nuestro cuerpo.
Creo que es razón suficiente como para empezar a pensar más en nuestra salud y utilizar productos naturales.

Por estas mismas razones, quise cambiar de desodorante e indagando por la red encontré esta alternativa que es muy sencilla de hacer y no resulta nada caro.
Los productos que se emplean son fáciles de conseguir en cualquier herboristería e incluso en algunos supermercados, pero si no te quieres complicar mucho en cualquier página de Internet puedes encontrarlos y los recibes cómodamente en casa.

Para realizar este desodorante natural y casero, tan solo necesitamos:

- Un cazo pequeño.
- Un colador.
- Un bote de desodorante de roll on que tengas en casa ya vacío.
- 100 ml de agua.
- Semillas de Lino.
- Aceite de Ricino.
- Bicarbonato Sódico.
- Otros Aceites Esenciales.
- Aceite de Argan (opcional).

Digo aceites esenciales porque dependiendo del aroma que quieras utilizar, puedes usar aceite de Sándalo, Coco, Eucalipto, para hacer un desodorante masculino, o de Jazmín, Rosa, Lavanda, para desodorantes femeninos, en fin, según gustos.

También suelo usar el Aceite de Argan ya que es un aceite rico en ingredientes naturales que desempeñan un papel en la renovación y regeneración celular, se usa para tratamientos corporales y evita la sequedad de la piel. Es un aceite que se usa mucho en productos de cosmética.

El Bicarbonato Sódico lo usamos porque es un agente natural que mata y elimina a las bacterias y por tanto es un agente desodorante que elimina el olor de sudoración de las axilas.

De las semillas de Lino se extrae el aceite de linaza, el cual es rico en ácidos grasos de la serie Omega 3, Omega 6 y Omega 9. Este aceite es usado además en la industria cosmética.
No sólo es un producto que podemos usar para hacer desodorante, sino que tiene muchas propiedades nutricionales y efectos potencialmente beneficiosos para la salud cuando se consume.

Creo que con todos estos puntos queda bastante claro los beneficios que nuestra piel va a tener con el uso del desodorante natural.

Para elaborar el desodorante tan solo necesitamos 5 minutos. Los pasos son:

1. Echamos los 100 ml. de agua en el cazo y lo llevamos a hervir. En cuanto el agua rompa a hervir echamos una cuchara sopera de Semillas de Lino y removemos con unas varillas durante 2 o 3 minutos. Las semillas de lino, al contacto con el agua, la cáscara de la semilla desarrolla una baba que nos va a espesar el agua. Hay que tener cuidado de no pasarse con la cocción, ya que mientras más tiempo pase, más se espesa el agua. Tenemos que buscar una textura ni muy líquida, ni muy cremosa ya que nos interesa que el resultado final pueda salir fácilmente por el rolón del bote.

2. Una vez pasados esos 2-3 minutos, retiramos del fuego y colamos el agua en un cuenco. Añadimos una cucharada sopera de bicarbonato sódico y seguimos moviendo con las varillas hasta que conseguimos que el bicarbonato se integre.

3. Después añadimos 3 gotas de aceite de Ricino, que nos va a ayudar a espesarlo más. Añadimos también varias gotas de aceite de Argan (como ya dije es opcional) y unas 15 gotas del aceite esencial que nos va a proporcionar el olor al desodorante, ya sea Sándalo, Jazmín, Rosa, etc. El que previamente hayamos elegido.

4. Con cuidado lo vertemos en un bote de desodorante vacío y tapamos.

5. Por último, le damos un pequeño toque artístico a nuestro bote y ya tenemos listo nuestro desodorante casero para su uso.

Un saludo a todos y hasta la próxima!

Pintar una pared de gotelé con varios colores.

Todos sabemos lo difícil que resulta pintar las paredes de gotelé usando varios colores. El problema surge cuando colocamos la cinta de carrocero para delimitar las zonas a pintar, evidentemente, la cinta no se pega bien a la pared, por culpa del gotelé, y al pasar la brocha, la pintura penetra por los recovecos que se quedan entre la pared y la cinta de carrocero. Sin embargo, existe una técnica que podemos usar para que quede bien, como si de una pared lisa se tratase, aunque eso sí, hay que dedicarle más tiempo. Pero si te gustan las manualidades y las cosas bien hechas, no te importará tardar un poco más.

Lo mejor es dibujar franjas o dibujos rectos, ya que adaptar la cinta de carrocero a las curvas es un poco más complicado, pero bueno, si tienes paciencia, todo se puede intentar.

En mi caso, quise pintar la pared principal de mi habitación con cuadrados de diferentes colores, así que, para empezar, lo necesario para ello fue un  metro, unas cuantas puntillas, un martillo y un tiralíneas (Por cierto, si no tenéis tiralíneas, el mío lo compré en la típica tienda de chinos que me salió baratísimo, y si bien, no era profesional, para el caso, me sirvió perfectamente). 

Una vez medida la pared, supe el número de cuadrados que quería dibujar y me serví de unas puntillas para marcar las esquinas, donde colocaría el tiralíneas para ir trazando.

Es importante que si en la pared hay enchufes, los desmontéis.

Cuando tengamos todo el dibujo trazado, colocamos la cinta de carrocero delimitando la zona que primero vamos a pintar, sirviéndonos de las líneas azules y colocando la cinta de carrocero por la parte exterior de la línea. ¡Supongo que es de sentido común! 

Ya colocada, empezamos a pintar. Si el dibujo que os habéis propuesto hacer tiene varios colores os aconsejo que antes de pintar os fijéis bien de qué color va cada zona y en la misma pared con un lápiz, apuntáis el color o con la misma brocha le dais un brochazo con ese color, así nos evitará el confundirnos en un futuro y acabemos pintado una zona del color que no corresponde. En mi caso, así fue quedando.

Una vez que está toda la zona pintada y seca, retiramos cuidadosamente la cinta de carrocero. 

Como ya os he dicho, el problema que tenemos con el gotelé es que la pintura penetra en los huecos que queda entre la cinta de carrocero, quedando los contornos de manera muy irregular.

Pero no te preocupes, porque ahora te voy a explicar la técnica para que al pintar con el otro color, esos bordes irregulares desaparezcan.

Una vez que hemos pintado, en este caso del color gris, toda la zona correspondiente, pasaremos a pintar el lado opuesto, por lo que colocaremos la cinta de carrocero sobre el color gris para delimitar la nueva zona a pintar. Pero para evitar que el nuevo color penetre y nos manche lo que ya tenemos pintado, lo primero que vamos a hacer es pintar, con una pequeña brocha, todos los contornos con el mismo color que ya hemos pintado (en este caso con gris), así taparemos con el color gris todos los huecos que queden entre el gotelé y la cinta de carrocero, y una vez seco, pintaremos con el nuevo color. 

Como la pintura gris ha tapado previamente todos los huecos existentes, evita que el nuevo color penetre y, cuando se haya secado, al retirar la cinta de carrocero, los contornos serán totalmente rectos.

Y, precisamente, así me quedó a mí.

Bueno, espero que mi explicación haya sido fácil de entender y que os haya gustado.

Un saludo.